Antes de que el hombre apareciera sobre la faz de la Tierra, los dinosaurios ya eran sus señores. Habían desaparecido -todavía no se conocen las causas de su extinción- y el hombre continuaba sin aparecer.
Ningún ser humano ha visto, pues, un dinosaurio vivo.
Todos saben, sin embargo, de sus dimensiones, de su aspecto amenazador, que muy posiblemente correspondiera a un carácter más bien pacífico y tímido.
Los catorce relatos que forman esta colección, fruto de la imaginación de alguna de las mejores plumas de la fantasía científica - Clarke, Aldiss, Bryant, Tiptree...- son reflejo de cómo estos grandes reptiles han pervivido, más allá de los límites del espacio y el tiempo, en los más oscuros sueños de la Humanidad.
Contine los siguientes relatos:
- Un arma para un dinosaurio. L. Sprague de Camp
(A gun for dinosaur, 1956)
-Pobre pequeño guerrero. Brian W. Aldiss
(Poor little warrior!, 1958)
-Hermano verde. Howard Waldrop
(Green brother, 1982)
-Época de incubación. Harry Turtledove
(Hatching season, 1985)
-Escapar. Steven Utley
(Getting away, 1976)
-Los corredores. Bob Buckley
(The runners, 1978)
-El último caballo de trueno al oeste del Misisipí. Sharon N. Farber
(The last thunder horse west of the Mississippi, 1988)
-Estratos. Edward Bryant
(Strata, 1980)
-La flecha del tiempo. Arthur C. Clarke
(Time’s arrow, 1950)
-Un cambio de tiempo. Gardner R. Dozois Y Jack Dann
(A change in the weather, 1981)
-El saurio que surgió en la noche. James Tiptree Jr.
(The nightblooming saurian, 1970)
-Dinosaurio. Steve Rasnic Tem
(Dinosaur, 1987)
-Dinosaurios. Geoffrey A. Landis
(Dinosaurs, 1985)
-Un dinosaurio en bicicleta. Timothy Robert Sullivan
(Dinosaur on a bicycle, 1987)
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